Hasta julio de este año, el Gobierno Nacional entregó más de 16.000 toneladas de soya a los productores pecuarios a un precio regulado de $us 363 por tonelada, como parte de las políticas implementadas para asegurar el abastecimiento de alimentos, como carne de pollo, a precios accesibles. Entre los beneficiarios de esta medida se encuentran los criadores de pollos y cerdos. Además, a los productores de leche se les ofreció cascarilla de soya a un precio de $us 80 por tonelada, buscando también estabilizar el precio de los lácteos.
Luis Siles, viceministro de Políticas de Industrialización, explicó que estas medidas son clave para sostener la producción alimentaria y atender la creciente demanda en el país. “Hasta julio hemos entregado más de 16.000 toneladas de soya a un precio regulado, apoyando directamente al sector pecuario”, detalló Siles, añadiendo que la soya constituye aproximadamente un tercio de la alimentación de los pollos, uno de los productos con mayor consumo en el mercado nacional.
El viceministro también recordó que, además del apoyo a los productores avícolas y porcinos, se ha facilitado la cascarilla de soya a un precio accesible para los lecheros, con el fin de evitar un aumento en el precio de la leche. “Con estas medidas de subvención y regulación, garantizamos alimentos a precios justos para la población”, enfatizó Siles.
En paralelo, Siles informó sobre la reciente inspección de 20 ingenios arroceros en los municipios de Montero y Yapacaní, donde se verificaron más de 80.000 toneladas de arroz, lo que asegura el abastecimiento de este producto esencial hasta finales de año. En este contexto, la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) continúa participando activamente en el Programa de Arroz, acopiando cantidades estratégicas que se comercializan en los más de 100 puntos de venta a nivel nacional.
Estas acciones gubernamentales se dan en medio de las denuncias realizadas semanas atrás por productores pecuarios, quienes advertían sobre el alza en el costo de insumos en los mercados, lo que dificultaba su labor productiva.