Por Rafael Tardáguila | Editor de Faxcarne

Si la semana pasada la amplitud en los precios regionales del ganado a faena era grande, en esta lo es mucho más aún.

El sorpresivo resultado de las elecciones primarias en Argentina, con el candidato ultraliberal Javier Milei como el más votado, se sumó a la devaluación de más de 20% decretada por el gobierno el lunes para determinar una explosión de los precios.

Aunque le costó establecer una nueva referencia, en un voluminoso remate realizado el miércoles los novillos de exportación se pagaron en un eje de Ar$ 1.700 el kilo a la carne, lo que da unos US$ 4,86.

Pero además, si a eso se le agrega el 9% de impuesto a la exportación -para equipararlo en cuanto a la competitividad con las cotizaciones en los demás países- da la friolera de US$ 5,29.

Entre las ganaderías exportadoras solo lo supera Estados Unidos.

La volatilidad estará a la orden del día en Argentina, por lo que no se pueden descartar bajas significativas.

Pero, por el momento, los precios superan a los de los demás países de la región por casi US$ 2 el kilo carcasa en el caso de Paraguay y Uruguay y casi que duplica la referencia en Brasil.

Es que en el vecino del norte pasa exactamente lo contrario.

Los precios de los animales a faena se hundieron a los niveles más bajos de los últimos tres años, desde agosto de 2020, plena pandemia.

Son inferiores incluso a los que se habían alcanzado en la crisis del segundo semestre de 2021 cuando Brasil estuvo más de 100 días suspendido de exportar a China por aquellos casos de vaca loca atípicos.

El valor medio del macho a faena en Brasil cayó a US$ 2,76 el kilo carcasa, referencia libre de impuestos y con pago a 30 días.

Incluso en Sao Paulo, donde los precios suelen ser los más altos de Brasil, la referencia se ubica por debajo de los US$ 3.