Bolivia se encuentra entre los países de menor consumo per cápita de leche, con solo 68 litros por persona al año.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una ingesta anual de 160 litros por persona. Para cerrar esta brecha, los productores bolivianos han intensificado sus campañas de incentivo para fomentar el consumo de leche. Durante el 2023, la producción diaria de leche en Bolivia alcanzó aproximadamente 1.533.000 litros.
Eduardo Cirbián, presidente de la Federación Departamental de Productores de Leche (FEDEPLE), destaca que, desde hace varios años, los productores implementan diversas campañas para elevar el consumo de leche entre los bolivianos. “En Bolivia, el consumo anual de leche es el más bajo de Sudamérica, con solo 68 litros por persona, mientras que la OMS recomienda al menos 160 litros al año. FEDEPLE y sus asociados trabajan para incentivar el consumo de lácteos y mejorar estos niveles a través de diferentes actividades. Día a día, llevan un alimento saludable y de excelente calidad a las diferentes industrias del país para que pueda llegar a la mesa de todos los bolivianos”, sostiene Cirbián.
La producción de leche en Bolivia es el resultado del esfuerzo de más de 6.000 lecherías en todo el país, que proporcionan empleo directo a más de 30.000 familias en todos los eslabones de la cadena productiva. En 2023, Bolivia produjo cerca de 1.533.000 litros de leche al día, de los cuales, aproximadamente 1.075.000 litros se produjeron diariamente en Santa Cruz, representando un 70% de la producción nacional.
De la producción diaria, un 63% recibe algún tipo de transformación a través de las distintas industrias del país.
Gracias a los altos estándares de calidad con que se produce, una buena parte de esta leche se destina a la exportación. Entre marzo de 2023 y febrero de 2024, Bolivia exportó 7.923 toneladas de leche en polvo, valoradas en 30.241.586 dólares, a países como Colombia, Perú, Venezuela y Cuba.
Según la FAO, un vaso de 240 ml de leche fluida de vaca aporta el 23% de las recomendaciones dietéticas diarias de calcio, cifra similar a la encontrada en una tajada de queso blanco o un vaso de yogurt. Además, una porción de leche también proporciona el 12% de la recomendación diaria de zinc y el 33% de fósforo. En cuanto a vitaminas, la misma cantidad de leche ofrece el 35% de riboflavina, el 48% de vitamina B12, el 20% de vitamina A y el 15% de vitamina D.
Los lácteos son esenciales en la prevención y tratamiento de la osteoporosis, obesidad, hipertensión arterial y diabetes. Además, contribuyen al mejoramiento de la memoria y son fundamentales para el crecimiento y aprendizaje en los niños. También previenen las caries dentales y muchos de ellos tienen propiedades funcionales que mejoran el funcionamiento del sistema digestivo y protegen de infecciones.