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Hilton argentino se recupera: precios rozan USD 16 mil FOB

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Hilton argentino se recupera: precios rozan USD 16 mil FOB

Los precios del enfriado Hilton, tras haber mostrado una tendencia a la baja la semana pasada, han comenzado a estabilizarse y a buscar un nuevo rango de valores, evitando así continuar con la caída que se había registrado previamente. Según fuentes del mercado de importación, los precios para el Hilton argentino se ubican actualmente entre US$ 15.500 y US$ 15.900 por tonelada FOB. Sin embargo, se advierte que el valor de US$ 15.500 parece ser un «techo», ya que se ha vuelto complicado cerrar acuerdos a precios superiores durante esta semana, reflejando cierta resistencia en el mercado a pagar más por el producto.

Por otro lado, en el caso de Uruguay, la situación presenta matices diferentes. Un importador señaló que la oferta de carne enfriada ha sido más limitada en comparación con semanas anteriores, lo que ha generado un rango de precios de negociación que oscila entre US$ 14.600 y US$ 14.800 por tonelada FOB. Este ajuste en la disponibilidad de la oferta uruguaya podría indicar una estrategia para mantener los precios dentro de ese margen y evitar que los valores sigan disminuyendo.

En cuanto al mercado de carne congelada, las ofertas provenientes de Uruguay han generado ciertas reacciones por parte de los importadores. Un trader explicó que los precios ofrecidos para cortes como el peceto, a US$ 7.000 por tonelada FOB, y la nalga, a US$ 7.600 por tonelada FOB, han sido considerados «altos». Esta percepción de precios elevados podría estar limitando la disposición de los compradores a cerrar acuerdos a dichos valores, lo que podría llevar a un ajuste en las próximas negociaciones si las ofertas no se adecúan a las expectativas del mercado de importación.

En resumen, el mercado de carne enfriada y congelada se encuentra en un punto de equilibrio donde las ofertas están tratando de encontrar un nuevo rango de precios que satisfaga tanto a productores como a importadores. No obstante, la resistencia a pagar más de ciertos valores podría condicionar el desarrollo de nuevos negocios, obligando a las partes a ajustar sus estrategias en el corto plazo para mantener la competitividad en el mercado internacional.