La decisión del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) de un levantamiento de la vacunación contra la fiebre aftosa en Santa Cruz para el próximo año despertó la preocupación en el sector agropecuario debido a los efectos que la medida podría llegar a tener, en especial en la economía del país.
Recientemente, el viceministro de Desarrollo Rural, Álvaro Mollinedo, aseguró que la medida del Senasag será revisada, en un momento que ya se trabaja en los ajustes. “Para nosotros es bien importante garantizar alimentos inocuos que cumplan con todas las condiciones y den garantías de que pueden ser consumidos por el consumidor final”, dijo en una rueda de prensa este pasado lunes.
Según publicó Eju.tv, el Subsecretario de Estado afirmó que los alimentos que se comercializan en el país “tienen que cumplir con todos los requisitos y nosotros no podemos descuidar como política de Estado y más que todo ahora que estamos exportando la carne”, añadió.
Según la autoridad gubernamental, los movimientos en la vacunación contra la fiebre aftosa corresponden a ajustes de orden administrativo que se trabajan con el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag).
De todos modos, el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Remmy Gonzales, dijo que el pedido de los ganaderos cruceños de seguir vacunando no es viable e indicó que la solicitud fue planteada por un sector de la dirigencia y no por todos los asociados.
Al mismo tiempo, indicó que a finales de mayo el país recibirá la certificación de libre de aftosa sin vacunación para el ganado vacuno de los departamentos de Beni y La Paz.