La pasada semana se llevó a cabo una reunión clave en el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, en la que participaron la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y representantes del sector agropecuario de Brasil. Este encuentro marcó un importante hito en la búsqueda de soluciones para avanzar en el acceso a semillas mejoradas y promover prácticas agrícolas sostenibles.

La colaboración entre ambas naciones promete ser un catalizador esencial para el fortalecimiento de la agricultura, al impulsar la adopción de tecnologías agrícolas avanzadas y promover un enfoque más sostenible en la producción de alimentos.

Este encuentro, que tuvo como preámbulo una reunión con el Presidente del Estado donde se reafirmó el compromiso de una agenda conjunta para el desarrollo productivo de Bolivia, se enfocó en el análisis de la valiosa experiencia de Brasil en el uso de semillas mejoradas. Además, se buscó obtener asesoramiento y apoyo por parte de la Empresa Brasilera de Pesquisa Agropecuaria (EMBRAPA) con el fin de fortalecer y enriquecer el sector agropecuario boliviano.

Esta colaboración proyecta brindar perspectivas enriquecedoras y soluciones concretas para impulsar la agricultura sostenible y mejorar el acceso a tecnologías agrícolas avanzadas en Bolivia.

Dentro de la agenda productiva, uno de los temas destacados fue la importancia del acceso a la biotecnología, considerado como una medida esencial para enfrentar los desafíos derivados del cambio climático que amenazan los niveles de producción agrícola y, por ende, la soberanía alimentaria del país. La adopción de tecnologías biotecnológicas puede desempeñar un papel fundamental en la resistencia de los cultivos frente a condiciones climáticas cambiantes, contribuyendo así a garantizar la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible de la nación.

José Luis Farah, el presidente de la CAO, resaltó la importancia de esta iniciativa al afirmar: “El acceso a semillas genéticamente modificadas es una solución que nos permitirá mitigar pérdidas, incrementar la producción y generar excedentes. De esta manera, podremos exportar granos que contribuirán al crecimiento económico de Bolivia y, además, garantizar la seguridad alimentaria, que es un compromiso del sector”.

Se resalta que el sector productivo de Bolivia posee un inmenso potencial para incrementar tanto su producción como su calidad, sin recurrir a la expansión de la frontera agrícola y manteniendo un firme compromiso con la preservación del medio ambiente. Esta estrategia se erige como un camino esencial hacia una producción sostenible, lo que a su vez consolida al sector como un pilar fundamental en el desarrollo económico del país. Esta visión busca armonizar el crecimiento productivo con la responsabilidad ambiental, asegurando un futuro más próspero y equitativo para Bolivia.

Fuente: El diario