La producción de papa en Bolivia ha experimentado un impresionante aumento en los últimos dos años, gracias a la implementación del proyecto de asistencia técnica respaldado por la cooperación coreana. En comunidades de los departamentos de La Paz, Cochabamba, Chuquisaca y Santa Cruz, las variedades Desiree y Huaycha han superado el rendimiento promedio de 7,2 toneladas por hectárea, marcando un hito en la agricultura boliviana.
El proyecto, denominado «Establecimiento de Comunidades Modelo para el Incremento de la Productividad del Cultivo de Papa a través del Uso de Semilla de Alta Calidad y Tecnologías Apropiadas», fue ejecutado por el Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (Iniaf) con el apoyo crucial del Programa Coreano para la Cooperación Internacional en Tecnología Agrícola (Kopia).
Félix Terceros, director del Iniaf, destacó que el éxito del proyecto se debió a la aplicación de tecnologías avanzadas y la asistencia técnica dedicada al seguimiento de la producción. Los resultados son notables: en Chuquisaca, la variedad Desiree logró un rendimiento promedio de 26,53 toneladas por hectárea, mientras que en Santa Cruz, se obtuvo un rendimiento promedio de 26,84 toneladas por hectárea, también con la variedad Desiree. En La Paz, se alcanzaron 16,46 toneladas por hectárea con la variedad Huaycha, y en Cochabamba, 12,35 toneladas por hectárea con la variedad Desiree. Así lo informó Los Tiempos
Incluso en Potosí, a pesar de los desafíos climáticos como la helada y la granizada, se logró un rendimiento promedio de 7,66 toneladas por hectárea con la variedad Desiree, superando ampliamente el promedio nacional de 7,2 toneladas por hectárea, según los datos reportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Los resultados de este proyecto son una clara señal de progreso en la agricultura boliviana y subrayan la importancia de la cooperación internacional en el desarrollo agrícola. El aumento en la productividad de la papa no solo beneficia a los agricultores, sino que también contribuye a la seguridad alimentaria y al crecimiento económico del país.