Jaime Hernández, el gerente general de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), ha expresado su creciente preocupación por el precio base establecido por el Gobierno para la tonelada de trigo en la presente gestión. Con un valor de $us 347,45, este precio representa una disminución del 16% con respecto al año anterior, una cifra que Hernández considera insuficiente para incentivar a los productores a sembrar trigo en las condiciones actuales.
“Si bien es un precio base, consideramos que no es un precio de incentivo para que realmente los productores, dadas las condiciones, se animen a sembrar trigo. Para el inicio de la siembra debería ser mejorado, de tal manera que constituya un incentivo para que el productor tome la decisión de siembra”, afirmó el ejecutivo.
Ante esta situación y con la campaña de invierno a la vuelta de la esquina, los actores del sector productivo están evaluando la posibilidad de migrar hacia otros cultivos de rotación, especialmente porque el Gobierno no contempla pagar una cifra cercana a los $us 415 de la pasada gestión.
Hernández reveló que hace dos semanas enviaron notas al viceministro de Comercio y Logística Interna, Grover Lacoa, para hacerle saber la preocupación del sector productivo y los argumentos que respaldan la necesidad de mejorar los precios.
“La expectativa que tiene hoy por hoy el productor es que el precio de compra de trigo de Emapa para esta campaña de invierno sea por lo menos de más de 400 dólares por tonelada. No olvidemos que los costos de producción se han visto incrementados precisamente por la falta de divisas”, agregó el gerente de Anapo.
La entidad productiva advierte que las perspectivas climáticas para la campaña de invierno no son las mejores, lo que hace que considerar traer trigo de importación, sumado a la falta de disponibilidad de divisas, no sea la alternativa más viable en comparación con incentivar la producción nacional de trigo.
El Gobierno ha declarado que el precio base estará vigente hasta la determinación del precio para el inicio del acopio invierno 2024, lo que significa que el precio fijado se mantendrá hasta el inicio de la cosecha.