Un estudio realizado por Santander revela una cosecha récord para varios commodities agrícolas este año. Esto impactará directamente en el precio de los alimentos en el país.
Uno de los puntos mapeados por el banco fue el actual ciclo ganadero, que influirá directamente en el precio de la carne bovina en los próximos meses. La previsión es una caída de 4% en estos precios dentro del Índice Nacional de Precios al Consumidor Ampliado (IPCA), que es el indicador oficial de inflación del país.
Según la encuesta, el aumento en el número de faenas mensuales elevará mucho la oferta de carne en el mercado, lo que ayudará a reducir los precios. Este factor podría llevar a que la @ alcance un precio de R$ 245 al final del año en términos nominales, el valor más bajo desde junio de 2019.
“Nuestra apuesta se basa en el momento favorable actual del ciclo ganadero en Brasil, cuando la oferta es amplia. Creemos que este factor de oferta pesa más que otros factores económicos y pronosticamos una deflación del 4% en
los precios de la carne”, dicen los economistas Felipe Kotinda, Daniel Karp y Gabriel Couto, de Santander Brasil.
En Brasil, el ciclo del ganado tiene un promedio de cinco a seis años, un proceso en el que el tamaño del stock ganadero aumenta y disminuye con el tiempo. En ella influyen varios factores: precio del ganado, costo de los insumos, período de gestación, tiempo requerido para criar terneros a peso de mercado, condiciones climáticas, entre otros.
En el análisis presentado por Santander, en diciembre la faena de vacas rondará las 700 mil cabezas mensuales, la mayor cantidad desde junio de 2020.