Tras la confirmación de la adhesión plena de Bolivia al Mercado Común del Sur (Mercosur), el país se embarca en un periodo de adaptación a las normativas del bloque regional. Este proceso no solo representa una oportunidad para el crecimiento económico, sino que también posiciona estratégicamente a Bolivia como un puente esencial entre la Comunidad Andina (CAN) y el Mercosur. El viceministro de Comercio Exterior, Benjamín Blanco, anunció la ambición de convertir a Bolivia en un país de tránsito, priorizando el sector del transporte.

Este anuncio se efectuó en el contexto de la adhesión plena al Mercosur, y se espera que la oficialización del depósito del Protocolo de Adhesión sea anunciada en la cumbre presidencial del jueves en Brasil. Blanco destaca que Bolivia se convertirá en el único país miembro de ambos bloques de integración sudamericanos, consolidando su posición estratégica en el corazón de Suramérica y sirviendo como punto de convergencia entre la CAN y el Mercosur.

“Bolivia va a pasar a convertirse en el único país que es miembro de los dos principales bloques de integración de Suramérica, tal como es la Comunidad Andina (CAN) y el Mercosur, en su posición estratégica del corazón de Suramérica, será el punto de convergencia entre ambos bloques de integración”, resaltó el viceministro de comercio exterior, Benjamín Blanco

La convergencia entre la CAN y el Mercosur abre nuevas posibilidades para Bolivia, especialmente en el ámbito del transporte. Blanco enfatiza el potencial del país en este sector, subrayando el avance en el desarrollo del corredor ferroviario de integración. Este proyecto busca convertir a Bolivia en un país de tránsito para mercancías que se desplacen del Atlántico al Pacífico, aprovechando su posición geográfica estratégica.

La estrategia de Bolivia no se limita al transporte; también busca capitalizar los encadenamientos productivos del Mercosur. Blanco señala la intención de ofertar insumos para los diferentes productos elaborados en este bloque económico, consolidando la posición de Bolivia como un actor central en la escena económica sudamericana.