El ministro de Desarrollo Rural y Tierras (MDRyT), Juan Yamil Flores Lazo, confirmó en una reunión con representantes de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (ANAPO) y el ingenio azucarero Unagro, avances significativos en la biotecnología agrícola en Bolivia. Durante el encuentro, se aprobaron dos puntos claves para fortalecer el sector productivo, entre los cuales el principal es la inminente aprobación del evento HB4 en soya, una variedad que promete revolucionar el rendimiento agrícola al ofrecer mayor resistencia a la sequía y adaptabilidad a climas extremos. Esta decisión, según afirmó el ministro, es una muestra de la intención del gobierno de apostar por herramientas científicas que contribuyan a la seguridad alimentaria y la sostenibilidad del agro boliviano. Además, Flores Lazo subrayó que el uso de tecnología moderna en los cultivos se traduce en beneficios económicos para los agricultores, quienes podrán maximizar su producción y enfrentar los retos climáticos de manera más eficiente.
En esta línea, el gobierno ha acelerado el proceso de autorización de biotecnología en el país. El pasado 10 de octubre, se liberó el evento Intacta, con todas sus variedades aprobadas para su uso en soya, lo que permitirá a los agricultores utilizar esta tecnología en la campaña de verano. Este evento biotecnológico representa un avance importante, ya que posibilita a los productores la adopción de variedades de soya mejoradas que ofrecen resistencia a insectos y mejores rendimientos. Flores Lazo enfatizó que este tipo de medidas busca transformar al sector agrícola de Bolivia en un referente de innovación y eficiencia, ya que las condiciones climáticas demandan el uso de semillas resistentes y productivas.
Por otro lado, se abordaron aspectos cruciales para el éxito de la próxima campaña agrícola, entre los cuales destaca la provisión de diésel. El suministro de este recurso fue uno de los temas centrales, debido a la dependencia de los productores de soya, maíz, arroz y caña en cuanto a la disponibilidad de combustible para sus actividades. Las autoridades acordaron establecer mecanismos que aseguren el abastecimiento de diésel a los municipios productores, asegurando que la campaña de verano cuente con el volumen necesario para cubrir la demanda. José Luis Farah, presidente de la CAO, destacó que esta decisión representa un avance hacia la estabilidad del sector y reiteró la importancia de contar con insumos suficientes para enfrentar los desafíos productivos y garantizar la seguridad alimentaria del país.
Finalmente, el evento HB4 fue ampliamente discutido debido a su impacto potencial en el sector productivo. Esta tecnología desarrollada por ANAPO es una variedad de soya genéticamente modificada para resistir la sequía, característica que la convierte en una herramienta invaluable para los agricultores en regiones con condiciones climáticas adversas. Con esta aprobación, Bolivia podría dar un paso significativo en la agricultura de precisión, ofreciendo a los productores una opción que no solo aumentará los rendimientos, sino que también contribuirá a una mayor sostenibilidad del cultivo. La liberación del evento HB4 es vista como un hito en la biotecnología boliviana, y Flores Lazo expresó su interés en extender el uso de tecnologías similares a otros cultivos importantes, como el arroz y el maíz, con el fin de optimizar la producción en todo el territorio nacional.