En la cuarta edición de la Faena Técnica Nelore 2025, los ganadores de la noche destacaron por su dedicación y esfuerzo en la mejora de la genética y la calidad de los animales presentados. En la categoría de lotes de carcasas de hembras y machos en confinamiento, el gran premio fue otorgado a Mario Anglarill, de la Cabaña El Trébol, quien presentó más de 40 animales, destacando especialmente las vaquillas jóvenes por su precocidad. Este reconocimiento subraya el compromiso de Anglarill con la mejora continua en su cabaña y su enfoque en la inseminación artificial para asegurar una calidad genética superior.

Miguel Ángel Eguez, gerente de Agro Sofía, empresa que participó activamente desde el inicio de la faena técnica y logró resultados sobresalientes, explicó que el éxito de la cabaña El Trébol no fue producto de la casualidad. “Este es un trabajo que comenzó hace dos años, porque son animales de producción propia, producidos mediante inseminación artificial. Usamos los mismos toros que criamos en la cabaña El Trébol, lo que ha sido parte de un proceso de largo plazo”, señaló Eguez. De esta manera, los ganaderos bolivianos continúan implementando nuevas prácticas para garantizar la calidad de la carne, especialmente a través de la mejora genética y nutricional de los animales.

Las vaquillas presentadas por la Cabaña El Trébol fueron seleccionadas no solo por su precocidad, sino también por su capacidad de crecimiento acelerado, lo que les permitió destacarse a pesar de haber sido inicialmente descartadas por no haber parido. “Las vaquillas que entraron a la faena fueron precoces desde que nacieron y, a pesar de ser descartadas por no parir, fueron seleccionadas por su velocidad de crecimiento”, explicó Eguez. Esta estrategia refleja un enfoque innovador y eficiente que resalta la importancia de la selección temprana de los animales, priorizando la velocidad de desarrollo y la adaptación a condiciones de confinamiento.

Por otro lado, en la categoría de carcasas alimentadas a pasto, el premio principal fue otorgado a la Hacienda La Fortuna, propiedad de Carmen Rivero Torrez, quien a través de un manejo dedicado de sus ejemplares logró sobresalir. Marcus Back, gerente de la hacienda, destacó el esfuerzo y la dedicación que se invierte en el proceso de selección de ganado alimentado exclusivamente a pasto. “Es un trabajo que requiere tiempo y dedicación, en el que buscamos animales con buen peso, características de carcasa destacables, precocidad y musculatura. Sabemos lo que queremos y hemos logrado resultados sólidos0”, comentó Back. Su enfoque en un manejo alimenticio natural, complementado con suplementación adecuada, permitió que la hacienda presentara animales con excelente calidad de carne, lo que refuerza el compromiso con la sostenibilidad y la calidad de la producción ganadera.

La Hacienda La Fortuna presentó 40 animales en la faena, los cuales fueron suplementados al 100% con peso vivo, lo que demuestra la efectividad de la estrategia de manejo alimenticio y la calidad genética seleccionada en su rebaño. Esta categoría refleja cómo las prácticas tradicionales de pastoreo pueden resultar en una excelente calidad de carne, respetando el entorno y asegurando animales de características excepcionales.

El evento de la Faena Técnica Nelore continúa consolidándose como un hito dentro de la industria ganadera boliviana. Con el paso de los años, esta competencia se ha establecido como una plataforma clave para la evaluación y promoción de la genética de calidad en el país, demostrando el progreso continuo del sector en su camino hacia la mejora genética y la producción de carne. La participación activa de los ganaderos, la mejora de las condiciones de los animales y el fortalecimiento de los vínculos internacionales confirman que Bolivia sigue avanzando de manera firme en la producción de carne de alta calidad, con proyección para satisfacer tanto los mercados nacionales como internacionales.