La segunda licitación de junio de la neozelandesa Fonterra, multinacional referencia en el precio mundial de los lácteos, mostró valores estables para el promedio de la canasta de productos. En el remate no hubo cambios y el precio se mantuvo en US$ 3,479 por tonelada.
Esta segunda licitación también arrojó que después de una seguidilla de resultados negativos en subastas pasadas, la leche en polvo logró estabilizarse con 0,0% quedando con US$ 3,172 por tonelada.
Por su parte, la manteca cerró a US$ 5.379 por tonelada, registrando una suba del 5,5% respecto a la cotización alcanzada en la primera licitación de junio. También la grasa de leche anhidra consiguió un resultado positivo de 0,5% hasta los US$ 4.758 por tonelada.
En cuanto a los productos que cayeron en sus valores fueron la leche en polvo descremada con una reducción del 2,3% y se ubicó con US$ 2.667 tonelada, al igual que el queso Cheddar con 3,3% que se situó en US$ 4.533.