Los criaderos de búfalos de Bolivia se destacaron en el curso de tipificación racial de la raza bubalina, organizado por la Asociación de Criadores de Búfalos con el propósito de promover y fomentar la cría de esta raza en el país. Rodrigo Molina, representante de la cabaña K De Oro, manifestó su satisfacción por la respuesta positiva de los criadores, quienes participaron activamente en el curso, llevado a cabo como parte de las actividades de Expocruz.

“Queremos profundizar en el conocimiento de la tipificación de razas. Es una iniciativa nueva en Bolivia que seguiremos impulsando para mejorar la selección genética de los búfalos en el país. Este es solo el comienzo”, afirmó Molina.

Expertos en tipificación

El curso fue liderado por Manuel Mazzai, técnico especializado en cría de búfalos, quien se mostró sorprendido por la calidad de los animales en Bolivia, resaltando las razas Murrah y Mediterráneo como las más comunes entre los productores locales. Mazzai explicó: “Evaluamos las características productivas de cada ejemplar, proporcionando a los productores las herramientas necesarias para identificar el animal ideal que necesitan en sus unidades de producción”.

“He visto animales muy bien presentados, que cumplen con los estándares raciales de las razas evaluadas. Me voy con gran satisfacción al presenciar el avance del búfalo en Bolivia”, comentó Mazzai.

El experto destacó la importancia de seleccionar machos y hembras bien caracterizados para cada raza, enfocándose en un balance corporal armonioso que cubra los tres tercios del animal. Además, subrayó la necesidad de iniciar registros de producción, con el fin de tecnificar el proceso y asegurar una generación futura de descendientes de alta calidad.

Expansión del hato bubalino en Bolivia

Actualmente, Bolivia cuenta con un hato de al menos 60 mil búfalos, con perspectivas de crecimiento sostenido gracias al interés creciente en la raza y al incentivo generado por eventos como el Simposio Internacional programado para el próximo año. El búfalo, originario de zonas tropicales como India, es ideal para el clima de Bolivia, ya que no requiere adaptación a las condiciones locales.

Mazzai también destacó el valor de la leche de búfala, conocida como “el gran oro blanco” debido a su alto contenido de grasa y sólidos totales, lo que la convierte en una opción altamente rentable para la producción de quesos, elevando su valor en el mercado.