En una decisión que subraya la confianza y continuidad en su liderazgo, la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) ha anunciado la tarde de este martes oficialmente la ratificación de su presidente actual, Fernando Romero, para el periodo 2024-2025.

Este anuncio, realizado en el contexto de la celebración del quincuagésimo aniversario de la asociación, refleja el compromiso continuo de Anapo con la estabilidad y el progreso en el sector oleaginoso en la región de Santa Cruz.

La asamblea ordinaria también marcó la renovación de cuatro puestos en el directorio. Se trata de Epifanio Zurita, André Ronald Larsen, Xiomara Ichazo y Gary Farell, con sus respectivos suplentes Juan Manuel Guerra, Ricardo Miranda, Abraham Nogales y Alejandro Rea; quienes se suman a los directores ratificados.

Junto a la reelección del presidente Fernando Romero también los representantes de los productores de granos de santa Cruz ratificaron a su directiva, compuesta por Richard Paz en la Vicepresidencia, Gary Farell en Tesorería y Adam Mérida como Secretario.

Esto no solo destaca la confianza en la visión y gestión realizadas durante el pasado año, sino también se alinea con el objetivo de la asociación de abordar de manera efectiva los desafíos futuros del sector agrícola, que incluyen gestionar el acceso a nuevos eventos de biotecnología para soya, maíz y trigo, principalmente; además de la profundización de la implementación de prácticas agrícolas sostenibles.

Esta continuidad en el liderazgo es vista como un pilar esencial para fortalecer la posición de Anapo en la defensa de los derechos de los productores y en la promoción de una agricultura competitiva y sostenible a nivel nacional e internacional.

El presidente reelecto, en su pronunciamiento, reiteró el compromiso de la asociación con la sostenibilidad y la innovación. “Nuestra reelección es un voto de confianza en la dirección que hemos tomado y un mandato claro para continuar con nuestro trabajo. En este 50 aniversario, nos comprometemos a redoblar esfuerzos para enfrentar los retos actuales, buscando siempre el bienestar de nuestros productores y la soberanía alimentaria de Bolivia”, enfatizó.

En el horizonte de Anapo, el fortalecimiento de la seguridad jurídica para los productores ante retos como los avasallamientos en Santa Cruz, y el fomento de la colaboración con el gobierno para desarrollar políticas que beneficien al sector oleaginoso, se perfilan como prioridades clave.

Estos esfuerzos buscan asegurar un futuro próspero para la agricultura boliviana y contribuir significativamente a la economía del país, mediante la exportación de los excedentes para la generación de divisas.

La decisión de mantener la actual presidencia en Anapo en un año tan simbólico demuestra la solidez y la visión a largo plazo de la asociación, consolidándola como un referente gremial para la defensa de los intereses de los productores de alimentos en Bolivia.