Las lluvias recientes han dejado un impacto variable en distintas regiones del país. En el Norte Integrado, hasta el momento, solo se han reportado daños marginales como resultado de las precipitaciones. Por otro lado, en los Valles cruceños, específicamente en Quirusillas, se estima que alrededor de 800 hectáreas de cultivos de maíz y frejol han sido afectadas por las intensas lluvias.
A diferencia de otras zonas, en Santa Cruz, las consecuencias de las lluvias han sido relativamente leves. Aunque se han registrado afectaciones en áreas productoras tanto en el Norte Integrado como en los Valles, las cifras oficiales indican que aproximadamente 2,800 hectáreas han sido impactadas. Sin embargo, las autoridades locales han solicitado una mayor presencia de entidades estatales para prevenir posibles desbordamientos y garantizar la seguridad de la población.
En el ámbito nacional, las lluvias han causado estragos en diversas regiones, especialmente en la Amazonia de Pando, donde se han observado niveles históricos de crecida en los ríos. Defensa Civil ha informado que 317 municipios en todo el país han sido afectados por las precipitaciones.
En el municipio de San Pedro, una crecida excepcional del río Piraí ha provocado la inundación de alrededor de 2,000 hectáreas de cultivos de soya, causando preocupación entre los agricultores locales. Aunque la mayoría de los distritos no sufrieron daños significativos gracias a la rápida disminución de las aguas, se ha destacado la necesidad de realizar trabajos de mantenimiento en diques y defensas fluviales.
Ante esta situación, las autoridades locales han hecho un llamado al Gobierno nacional y al Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi) para que brinden asistencia en la evaluación y ejecución de proyectos destinados a fortalecer las defensas contra inundaciones. Aunque hasta el momento no se han reportado afectaciones graves a comunidades o viviendas, se reconoce el impacto negativo en el sector productivo, especialmente en áreas como Sagrado Corazón y Hardeman.
Por otro lado, en los Valles cruceños, Nué Morón, presidente de la Asociación de Fruticultores y Horticultores de Santa Cruz (Asofruth), ha informado que «las lluvias han sido intensas en la zona de Quirusillas, ocasionando daños significativos en cultivos de maíz y frejol». Además de las pérdidas de cultivos, la infraestructura local también ha sufrido daños, con caminos destrozados y cañerías arrastradas por la fuerza del agua. Sin embargo, en otras áreas como Los Negros, donde se produce hortalizas, las afectaciones han sido mínimas y la producción se ha mantenido estable.